¿Cuál es la relación existente entre las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones con la labor educativa? Teniendo en cuenta que las TIC se refieren a la producción, presentación y transferencia de datos, mediante el uso de diversos códigos —texto, imagen, sonido, entre otros—. La respuesta, sin duda alguna, parte de la investigación: ejercicio previo, juicioso y riguroso que garantiza la calidad del producto comunicativo.
Según Omar Rincón, es necesario imaginar una comunicación que sea capaz de formar otras ciudadanías. Necesidad relacionada con la aparición de nuevas tecnologías que nos trasladan a un espacio y un tiempo distinto al que conocieron generaciones pasadas, es decir, el espacio en el que vivimos no solo debe ser entendido desde los límites físicos. Al respecto, Moles y Romer (citado por Jiménez, 2000) desarrollan la teoría de los nichos territoriales, su idea principal es que el ser humano habita diferentes ámbitos de manera simultánea —casa, barrio, ciudad, región, mundo—.
Los medios electrónicos nos permiten traspasar fronteras, como es el caso del internet y la televisión digital. Pero esta oportunidad no deja de ser un desafío para que desde el aula renovemos las narrativas, ya que los imaginarios de las personas están en constante cambio. Por ello el éxito de esta simbiosis dependerá de la combinación perfecta entre contenido y forma para un tiempo y lugar determinado.
En tercer lugar, me referiré al cine y las nuevas tecnologías. El uso de planos, enfoques, ángulos y colores deben estar argumentados con el propósito del equipo de producción, con el tipo de historia, sus personajes y con el público. Conocer las reglas que existen a la hora de contar una historia nos permite romperlas, así el video, el internet, el celular o el cine cambian la forma de relacionarme con el mundo e imponen la necesidad de nuevas formas de contar y por lo tanto de ver.
Cuando se registran estos cambios de horizonte nadie dice que las cosas vayan mejor o peor: Simplemente han cambiado, y también los juicios de valor deberán atenerse a parámetros distintos. Debemos comenzar por el principio a interrogarnos sobre lo que ocurre. (Eco, s.f.)
En conclusión, todos tenemos algo que decir, lo importante es saber cómo contarlo y por qué lo contamos.
https://https://www.youtube.com/watch?v=mdhMTWt5eLU
Referencias
Jiménez, G. (2000). Territorio, cultura e identidades. En J. M. Barbero, Cultura y región. Bogotá, Colombia: Universidad Nacional. Recuperado de https://www.culturascontemporaneas.com/contenidos/region_socio_cultural.pdf
Eco, U. (1986). Cultura y nuevas tecnologías. Madrid: Novatex.
Rincón, O. (2010). Nuevas narrativa televisivas: relajar, entretener, contar, ciudadanizar, experimentar. Recuperado www.revistacomunicar.com/verpdf.php?numero=36&articulo=36-2011-06