El documental se construye a partir de la unificación de diferentes narrativas y el manejo de un lenguaje específico – planos, angulaciones, movimientos de cámara, sonido, iluminación, montaje, entre los principales. Intervienen también elementos técnicos como los equipos de sonido, las luces, la cámara y el software de edición. El proceso requiere de aprendizajes, de tiempo, dedicación, pero sobre todo, saber que el documental parte de la observación de la realidad, de un acercamiento profundo a ella y de una mirada crítica hacia el mundo que se quiere re-crear por medio de este lenguaje audiovisual.
En este sentido podemos definir con Carlos Velo, documentalista mexicano, que “el cine documental es aquel que trabaja con la realidad misma de los hechos de la vida, tanto de la vida que pueda analizar un científico, un biólogo, como de la vida social de los seres humanos” (2003, p.477). Sus implicaciones son amplias y requieren de un trabajo consciente y a profundidad. Trabajar con la realidad de los hechos de la vida involucra un respecto hacia el otro que accede a ser mostrado y narrado en el producto documental, y una postura ética del realizador frente al tema, los personajes y la historia que se desarrolla. La estructura narrativa del producto es una elección del documentalista, quien determina la mejor manera de desarrollar la historia. “Vemos, por lo tanto, aquellos aspectos de la realidad que el artista ha seleccionado para mostrarlos. Y a partir de ese instante, ya percibimos una posición definida del realizador frente a la realidad que está tratando artísticamente. No se trata de un testigo pasivo, sino de un actor más […]. Y un actor no es imparcial, toma partido. No es objetivo” (Gutiérrez Alea, 2003, p.454). En este sentido, “el comportamiento, la acción y su interacción son los mejores medios para que un documentalista muestre de una manera convincente cómo vive la gente” (Ospina, p.2).
El público de un documental es un público crítico, que debe cuestionarse, poner en duda sus prejuicios y generar un nuevo conocimiento a partir de la experiencia de visualización. ¿Cómo logra todo esto un producto audiovisual? Es mediante la articulación perfecta entre la imagen, el sonido y la historia. Debemos recordar que el documental nace desde el momento mismo que surge el cine y se desarrolla a la par con éste, de forma artística.
III Muestra Documental del Programa
Ahora bien, ¿cuál es el papel del ejercicio documental en la formación del comunicador social y periodista? La primera reflexión que surgió en el diseño del proyecto articulador entre tres asignaturas de octavo semestre del plan de estudios del Programa, fue la necesidad de generar un acercamiento directo del estudiante con la realidad social de la ciudad de Ibagué y de la región. El comunicador social y periodista de la Universidad de Ibagué es un gestor social y en esos términos debe ser capaz de desarrollar un diálogo con el otro. El documental lo que permite es que ese diálogo adquiera una forma concreta y pueda difundirse.
V Muestra Documental
El ejercicio consiste en determinar ciertas actividades de aprendizaje desarrolladas en tres asignaturas de manera articulada para generar un proyecto académico de alcance comunitario y con la intención de convertirse en un producto documental nacional. Es así como en las asignaturas de Comunicación y Desarrollo y Periodismo Ciudadano se propicia la reflexión teórica y se determina la metodología de acercamiento a una comunidad específica. La asignatura de Producción en Televisión trabaja sobre la realización y las formas de narrar audiovisualmente. Antes de finalizar el semestre académico se realiza el proceso de difusión en dos instancias: la Universidad de Ibagué y la comunidad con la que se realizó el documental. Esta última, es una forma de entregarle a la comunidad el trabajo conjunto que desarrollaron con los estudiantes y que busca prolongarse como medio alternativo de comunicación en un grupo social determinado.
Este proyecto articulador de octavo semestre del programa de Comunicación Social y Periodismo, orientado desde la formación por competencias y que establece claramente actividades de aprendizaje que se desarrollan desde el principio en las tres asignaturas citadas anteriormente, ya cumple con su tercera versión, ha dejado once productos, tres de los cuáles han participado en muestras audiovisuales en Bogotá y Manizales. Ejemplos de estos trabajos se pueden encontrar enlaces tales como:
https://www.youtube.com/watch?v=uKFFkLcZvaM y https://www.youtube.com/watch?v=jnkLVADlrZE
Bibliografía
Gutiérrez Alea, Tomás “El free cinema y la objetividad”. En Paranaguá, Paulo Antonio (ed.), (2003), Cine documental en América Latina. España, Cátedra, p.p. 452-455.
Ospina, Luis, Manual de video documental. p.p. 1-14, s.d.
Velo, Carlos “Diálogo sobre cine documental”. En Paranaguá, Paulo Antonio (ed.), (2003), Cine documental en América Latina. España, Cátedra, p.p. 477-490.