«El conocimiento es un desafío permanente»

La directora del Centro de Innovación Educativa ÁVACO de la Universidad de Ibagué, Cecilia Correa Valdés, le cuenta al periódico digital ÁVACO/News parte de sus recuerdos, a través de los objetos que la acompañan en la oficina, «y le dan vida al  lugar donde más permanezco».

Llegó a la Universidad de Ibagué con la hoja de vida debajo del brazo, cuando Luis Eduardo Quintero era Rector. Venía como catedrática de la U. del Tolima, organizó su hoja de vida, se auto presentó, y por más  de 10 años realizó sólo docencia en la Universidad. Cecilia Correa Valdés, chilena de nacimiento y colombiana por amor, vio más futuro hacer parte de la construcción de una universidad, a la que después de 29 años, le debe la realización de su vida académica y educativa. “Los seres humanos que podemos estar en una universidad enseñando, somos seres privilegiados porque tenemos una responsabilidad muy grande con el futuro , la región y los jóvenes”.

Su primer trabajo en el Tolima fue con el Comité  de Cafeteros para realizar una investigación en tres centros de formación cafetera: Chapetón, Planadas y en la vereda el Limón, en Chaparral,  producto del posgrado que realizó en la Universidad Javeriana, en “Investigación educativa”. El tema del café le apasiona, no sólo para compartir un tinto con compañeros y amigos, sino para conocer la realidad cotidiana de los pequeños caficultores y de sus familias. Gracias  a sus amigos  dirigentes cafeteros,  abordó el tema del desarrollo rural y les colaboró  en proyectos sobre la diversificación  de  la zona cafetera. Esta fue su primera oportunidad para  viajar y conocer Ibagué y el Tolima. Luego vendrían muchos viajes más, por tierra y en helicóptero junto al ex gobernador del Tolima, Guillermo Alfonso Jaramillo Martínez, como secretaria de Planeación del Departamento y, luego, como secretaria de Educación Municipal, conoce todos los munición del Tolima, así como la zona rural de Ibagué.

Una vida dedicada a la educación.

Al preguntarle a Cecilia, cuál ha sido su proyecto más querido en la universidad, expresa: “Con más cariño recuerdo el   Centro de Investigación, consultoría  y extensión a la comunidad (CICEC), trabajábamos en investigación y lo que hoy se conoce como proyección social;  fue un desafío grande  porque viajábamos con los alumnos en condición de trabajo de grado por todo el Departamento. Este proyecto es como abuelo del actual programa de la Universidad: Paz y Región.  Logramos importantes intervenciones en la agroindustria, con estudiantes de Mercadeo e Ingeniería Industrial, y la implementación de la reforma descentralista que se iniciaba en Colombia, con estudiantes de Contaduría y Administración Financiera”.

Otro proyecto importante que recuerda Cecilia fue la Escuela de Gobierno y Asuntos Públicos: “trabajábamos en el área de planeación de los municipios y ayudábamos a montar las unidades de planeación municipal, proyectos y planes de desarrollo. De aquí salieron dos cosas importantes: la primera –personal-  que llegué a ser secretaria de Planeación del Departamento y, en lo académico, creamos  una especialización en Gestión de desarrollo de entidades territoriales, con tres cohortes bastante exitosas”.

Finalmente, en su nueva oficina relata que el desafío de dirigir un Centro de Innovación Educativa es importante porque no es nativo digital. «Es un reto lograr que los docentes cambien sus hábitos y prácticas, producto de la formación presencial y tradicional a la que están acostumbrados y empiecen a incorporar las TIC, así como a fomentar los entornos virtuales y romper esos mitos de cursos pequeños. En ÁVACO hemos logrado introducir el tema de las TIC de una forma bastante eficiente; ha sido un trabajo reconocido, gratamente, por los mismos docentes. El futuro: terminar con el ciclo de formación docente actual  y avanzar en  la producción de Objetos Virtuales de Aprendizaje y en  la formación e-learning”.